miércoles, 14 de diciembre de 2011

La traición que no cesa

El Jefe del Estado constitucional recibe a Mikel Recondo (ahora Errekondo) representante del brazo político de ETA y amigo personal de su yerno, actualmente encausado por una trama de corrupción y malversación de fondos públicos, dándole la enhorabuena por su vuelta a las instituciones del Sistema.
El nuevo presidente del Congreso de los Diputados, Jesús Posada (del PP), da la bienvenida al hemiciclo a los diputados de Amaiur, partido político de ETA, verificando de ese modo la metamorfosis etarra. Entre ellos Iñaki Antigüedad, miembro histórico del entramado político de ETA pese a su ascedencia castellana o Rafael Larreina que conjuga su pertencia al Opus Dei con su militancia en la coalición etarra.

Hay imágenes y noticias que se comentan por sí solas. Durante el año 1998 el PP inició una campaña de claudicación ante ETA en la que se contemplaban medidas de índole político con la apertura de un proceso "independentista" en Vascongadas con la introducción traidoramente en el mismo de Navarra y que se concretó en la concesión de una enorme amnistía encubierta a cientos de presos asesinos etarras y en la cesión de cientos de competencias políticas al falso "gobierno vasco" de aquel entonces, en manos del PNV y HB que sirvieron para fortalecer el adoctrinamiento separatista y el exterminio contra los vascos no nazionalistas. Sólo un problema de plazos evitó que consumase la total traición. Entonces, como antes y como siempre, los carlistas estuvimos frente a los etarras y sus cómplices (todo el sistema constitucinal del 78), plantándo cara muchas veces sólos y siempre en vanguardia. La salida del gobierno (de ocupación) de España del PSOE no atempera, sino que agrava, la situación de claudicación que retomara públicamente --pues discretamente siempre ha existido este proceso de la instauración constitucinal del 78-- dicho gobierno (de ocupación).



  • Otegi elogia el 'esfuerzo' de Aznar en la tregua del 98
    Redacción

    12/12/2011

    El líder de Batasuna ha dejado "una rendija abierta" para lograr acuerdos con Rajoy y ha dicho que "los presos están en la agenda", pero ha matizado que "no la manejan".
    El líder de Batasuna Arnaldo Otegi ha asegurado en una nueva entrevista que está esperanzado en posibles acuerdos con el nuevo gobierno de Mariano Rajoy y ha elogiado el papel de José María Aznar en las conversaciones de 1998.

    "No supimos valorar en sus justos términos el esfuerzo y el gesto que hizo el Presidente Aznar al denominarnos MLNV y autorizar el contacto con nosotros. Creo sinceramente que cometimos un error (...) dejo abierta una rendija a la esperanza de que ahora si seamos capaces de alcanzar acuerdos", ha declarado Otegi. En ese sentido, el portavoz de Batasuna ha hecho hincapié en que "el concurso constructivo del PP es absolutamente necesario para alcanzar un escenario de soluciones definitivas".

    En una entrevista concedida a la Cadena Ser, el portavoz abertzale ha dicho que los presos de ETA "están en la agenda" del nuevo escenario abierto tras el comunicado de cese definitivo emitido por la banda, pero ha matizado que ese colectivo "no maneja" esa agenda. En los mismos términos se ha referido a las víctimas, si bien admite que ETA debe "adoptar una decisión que pase por el reconocimiento y la voluntad de reparación a las víctimas". Asimismo, sobre las víctimas ha dicho que "exigirles que entiendan, acepten o incluso perdonen no es razonable, máxime cuando las heridas son tan profundas y tan recientes".

    Sobre el reciente comunicado dice que el día de su publicación compartió el alivio que debieron sentir los cargos electos que tenían coartada su libertad: "Compartí desde mi celda la probable y segura alegría y alivio de todos aquellos cargos electos que tenían coartada su libertad como consecuencia de la actividad de ETA. Me alegré mucho por ellos y sus familias".

    Otegi, condenado a 10 años de cárcel por la Audiencia Nacional por su calidad de dirigente de ETA en el 'caso Bateragune', ha llegado a tachar de "inhumanas" las "estrategias militares" y ha dicho sentirse "profundamente satisfecho" por haber apostado por "renunciar a la utilización de la violencia para la consecución de objetivos políticos".

    También se ha referido a otros aspectos como el "histórico éxito" electoral de Amaiur, al tiempo que ha dicho que "se debe gestionar sin suscitar sentimientos negativos en el Congreso de España" desde un grupo parlamentario propio.